Las PYMES, motores sostenibles de una recuperación verde
Apenas el 14% de las PYMES accederá a los Fondos Next Generation
El sector empresarial se enfrenta a un nuevo modelo productivo marcado por la crisis del Covid-19. Los fondos europeos son claves para la aceleración del desarrollo y en este marco las pequeñas y medianas empresas, las pymes, son un motor sostenible de aceleración económica que no se pueden quedar a la cola de esta recuperación. Apenas el 14% de las PYMES accederá a los Fondos Next Generation según la última publicación del barómetro de los Gestores Administrativos. Además advierten de que “todas las medidas de ayuda están más pensadas para las grandes empresas que para las pequeñas”, un dato sombrío que no acompaña la realidad de que más del 99% de las empresas de la Unión Europea son PYMES, como informaba el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo en su Marco Estratégico en Política de Pyme 2030. Más de 7.000 millones de los fondos europeos ya los ha asignado el Gobierno a vivienda, educación y transición ecológica de las comunidades con más de 1.000 millones a cada partida.
La Institución Esade también advierte de la importancia de que estos fondos lleguen a las PYMES y del impulso que supone para el tejido productivo español. Su impacto en el desarrollo económico se mide también en la creación de empleo. Las PYMES generan más de 10 millones y medio de puestos de trabajo, más del doble que las grandes corporaciones, aunque todavía les queda un largo camino por recorrer para minimizar su impacto medioambiental y trabajar en la reutilización de materiales.
Este crecimiento requiere una transformación verde liderada por emprendedores sostenibles con un nuevo enfoque empresarial. Una oportunidad única en la que PYMES y micropymes con una actividad justa pueden contribuir a una recuperación justa y verde.
Rentabilidad, pero no a cualquier precio
En este sentido, las finanzas ASG, Ambientales, Sociales y de Gobierno corporativo, adquieren una gran importancia, unos fondos en los que la Comisión Nacional del Mercado de Valores exige que las empresas dediquen más del 50% a la sostenibilidad. Junto con la Responsabilidad Social Corporativa (RSC) y el Plan de Recuperación donde nos jugamos el presento y el futuro, estas inversiones exigen en este contexto social, político y económico, sostenibilidad y saludabilidad para asegurar que las personas sean las que ganen.